Nuestro día a día por las calles de Boadilla es, como en cualquier otra localidad de Madrid, rutinario. Las obligaciones cotidianas nos llevan a que no prestemos atención a lo que nos rodea y nos focalicemos, exclusivamente, en el trabajo, que nuestra familia crezca sana, y alguna actividad de ocio de vez en cuando.

Y es una verdadera lástima, porque los boadillenses tenemos la gran fortuna de vivir en una localidad llena de «bellezas» arquitectónicas que, aunque pasen desapercibidas por nuestra vorágine, son dignas de admirar.

El Palacio del Infante Don Luis, el Convento de la Encarnación o el Palacio de San Cristóbal son solo algunos ejemplos del rico patrimonio cultural con el que cuenta Boadilla del Monte, y que animamos a descubrir.

Incluso en la página web del Ayuntamiento puedes encontrar una ruta para, en un día, recorrer todo lo que te estás perdiendo de la localidad en la que vives. Y para que veas que no te engañamos, aquí te dejamos algunas pruebas:

Fotos: Ayuntamiento de Boadilla del Monte