Las noches de verano en Boadilla del Monte tienen un aroma especial. Ese que mezcla el frescor de los jardines del Palacio del Infante Don Luis con el sonido de guitarras y voces en vivo, el murmullo de las copas y la brisa que acaricia la terraza. Es el ambiente que se respira en Los Jardines del Infante, un espacio que ha logrado convertirse en uno de los grandes referentes para disfrutar de la temporada estival en la localidad.
Ubicado en un entorno privilegiado, dentro del recinto histórico del palacio, este restaurante terraza ofrece una propuesta que va mucho más allá de la gastronomía. Aquí, la experiencia se completa con música en directo, cócteles cuidadosamente preparados y un servicio pensado para que tanto adultos como niños se sientan parte de algo único.
Un escenario mágico para las noches estivales
Cada miércoles, a partir de las 21:30 horas, Los Jardines del Infante se transforma en un pequeño escenario al aire libre en el que artistas locales y nacionales interpretan versiones acústicas que van desde el pop hasta el flamenco, pasando por grandes clásicos internacionales. La programación de julio es un reflejo de esa diversidad musical que pretende atraer a públicos de todas las edades. Las primeras notas llegan el 9 de julio con un repertorio que combina pop y flamenco a través de las cálidas armonías de guitarra, piano y voz en vivo.
Una semana más tarde, el 16 de julio, será el turno de Radiosphere, que traerá versiones internacionales para quienes buscan dejarse llevar por sonidos más globales.
El 23 de julio regresan las versiones pop con un formato íntimo y acústico, y el ciclo se cerrará el 30 de julio con Lio Gordo, que presentará un vibrante espectáculo de flamenco fusión.
El entorno no puede ser más sugerente: jardines cuidados al detalle, amplias zonas verdes y la silueta majestuosa del palacio como telón de fondo. Todo está diseñado para que el visitante se sumerja en una atmósfera donde el tiempo parece detenerse y cada noche sea una experiencia diferente.

Gastronomía para todos los gustos en un entorno histórico
La propuesta gastronómica de Los Jardines del Infante está a la altura del enclave en el que se encuentra. El restaurante cuenta con dos ambientes diferenciados para adaptarse a todos los planes. Por un lado, la terraza principal es perfecta para quienes buscan una cena más formal, con una carta que combina platos elaborados y opciones frescas y ligeras para las noches más cálidas. Por otro lado, la zona chill out invita a disfrutar de un ambiente más relajado, con sofás cómodos y una oferta de cócteles, copas y picoteo ideal para alargar la noche entre amigos o en pareja.
Los sabores se fusionan con la música y el paisaje, creando una experiencia sensorial completa en la que cada detalle importa, desde la cuidada presentación de los platos hasta la iluminación suave que acompaña la caída de la noche.
Un plan pensado para toda la familia
Pensando en quienes acuden con niños, Los Jardines del Infante ha querido que su propuesta sea también inclusiva para las familias. Por eso, los viernes, sábados y domingos de 20:30 a 22:30 horas, ofrecen un servicio de monitores infantiles. Durante esas horas, los más pequeños pueden disfrutar de juegos y actividades en un espacio seguro y supervisado, mientras los adultos se relajan y cenan con tranquilidad. Además, la carta incluye opciones infantiles y una selección de postres pensada para conquistar a todos los paladares, desde los más pequeños hasta los más exigentes.
Un oasis de cultura, ocio y gastronomía
Los Jardines del Infante abre sus puertas de miércoles a domingo, adaptando sus horarios para ofrecer tardes y noches llenas de vida. Los miércoles y jueves el horario es de 20:00 a 02:00 horas, mientras que los viernes, sábados y domingos amplían su apertura desde las 19:00 horas hasta las dos de la madrugada. La flexibilidad horaria permite disfrutar tanto de una cena temprana como de una copa al caer la noche, siempre con la comodidad de estar en un enclave natural y tranquilo.
Con una programación musical pensada para emocionar, una oferta gastronómica versátil y un entorno que respira historia y naturaleza, Los Jardines del Infante se consolida como uno de los destinos imprescindibles para las noches de verano en Boadilla. Más que un restaurante, es un lugar donde se crean recuerdos: cenas bajo las estrellas, conversaciones entre acordes de guitarra y risas compartidas en un rincón del palacio que parece diseñado para detener el tiempo.
Para más información o reservas, los interesados pueden llamar al teléfono 663 213 215 o visitar la página web. El restaurante se encuentra en Avenida de Adolfo Suárez 27, Boadilla del Monte.